20 junio, 2023

Uno de los capítulos trascendentes en la vida de un colegio es el de las Fiestas Patrias. En las proximidades de esas fechas, desde cada aula, en cada grupo de chicos y chicas, surge el entusiasmo.

Los docentes narran los hechos históricos y, a partir de ese relato, el interés y la actividad creativa explota.

Se inician los preparativos en los días cercanos a cada fecha.

Aulas, patios, salones, empiezan a transformarse en talleres en donde se realizan escenografías creadas por las manos hábiles de chicos y chicas. Las carteleras se transforman en pregones de Patria y su Historia. Nuestra Bandera celeste y blanca y las escarapelas coronando esos trabajos.

Y se inician los ensayos. Los patios, los salones, se convierten mágicamente en teatro donde el ensayo es lo acordado, y el director escénico es el docente. Los estudiantes, actores improvisados, concentrados en su rol, inspirados. La felicidad que les produce esa participación se evidencia en sus rostros, en sus expresiones después del ensayo, en su renovado entusiasmo. Es imposible que el resultado no sea óptimo.

El día asignado para el festejo el colegio abre sus puertas a las familias. Los disfraces, banderas, escarapelas y carteleras coloridas los entusiasman y convocan a participar.

En este capítulo se destaca el 20 de Junio, el día en el que los estudiantes de 4to grado realizan la “Promesa a la Bandera”. La emoción y el compromiso de los protagonistas se hace evidente. Todo esto, que sucede y sucedió a lo largo de la historia escolar conmueve y conmovió siempre y queda en la memoria y el corazón de los protagonistas. Las fotos son testigos y el cajón que las guarda se transforma con el tiempo en el arcón del tesoro escondido . Cada hogar tiene el suyo, el colegio también, y a él acudimos en busca de revivir esos momentos especiales e irrepetibles.

Ninguna Inteligencia Artificial podrá suplantar estos momentos porque sería como suprimir los latidos de un corazón, el flujo de vida de una comunidad. Sí podrá colaborar aportándonos elementos, facilitando nuestra búsqueda de informaciones diversas. Pero las vivencias intensas que se producen al compartir horas de risas, discusiones amables o no tanto, acuerdos y desacuerdos que llegan al final a buen puerto, ese aprender a compartir, disfrutando ese espacio de libertad creativa, es imposible de reemplazar.

Estas fechas nos llevan a tener presente que debemos aportar y compartir lo mejor de cada uno en la actividad y rol social que nos toca. Queremos una Patria con destino glorioso, como lo proyectaron nuestros Próceres, para nuestros hijos y nietos.

¡Allí vamos!

¡VIVA LA PATRIA!

María Marta Fernández Serrano
Directora General